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Dicen que uno de los mejores viajes que uno puede hacer en esta vida es recorrer el Camino de Santiago, una de las rutas de peregrinación más importantes del mundo y reconocida como el Primer Itinerario Cultural Europeo. Con diferentes alternativas de trayecto, cada vez es más frecuente que los peregrinos opten por realizar su recorrido en bicicleta en lugar de a pie.
Aquí te proponemos las rutas más adecuadas para que tu peregrinaje vaya sobre ruedas. Descubre una forma diferente de disfrutar de una de las experiencias más especiales que existen para los viajeros más aventureros. Elige la que más se ajuste a tus gustos y posibilidades y afronta un reto que nunca olvidarás. Es más, no nos extrañaría que te atrevieras a repetir.
Camino Francés
El Camino Francés es la ruta más demandada para llegar hasta Santiago de Compostela en bicicleta. Ir sobre dos ruedas reduce el trayecto a la mitad de tiempo que si lo haces andando.
Parte desde Roncesvalles, porque la primera etapa del Camino Francés, saliendo desde St-Jean-Pied-de-Port, no es posible realizarla en bici si no tienes una muy buena forma física.
Es una ruta ideal para quienes se estrenan en el Camino. Sale desde la mencionada localidad del pirineo navarro y pasa por La Rioja y Castilla y León, es decir, por la zona norte de la península pero por el interior.
¿Cuánto se tarda en recorrerlo?
En total, el recorrido desde Roncesvalles hasta Santiago es de cerca de 800 kilómetros, pasando por senderos y caminos por los que se puede circular en bicicleta la mayor parte del tiempo. En algunas zonas deberás caminar, pero hay tramos alternativos si no quieres bajarte de la bici.
Se suele tardar entre diez y catorce días en realizar el trayecto completo.
A lo largo del recorrido, que se recomienda hacer en unas once etapas (de entre 50 y 100 kilómetros diarios), puedes encontrar numerosos albergues. No en vano, esta ruta del Camino de Santiago es la mejor equipada en cuanto a infraestructuras se refiere, por eso es la preferida de los peregrinos.
En el caso de los ciclistas, hay albergues especialmente preparados para que puedan guardar sus bicis con seguridad mientras descansan.
La mejor época para realizarlo es en primavera y otoño.
Camino Portugués
Esta alternativa permite a los ‘bicigrinos’ conocer dos países a la vez que realizan el Camino de Santiago.
Su inicio y su final está en dos ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: Oporto y Santiago.
Se realiza por la costa (recuerda que el Camino Portugués tiene también una variante central que parte desde Lisboa) y está recomendada para ciclistas algo más expertos.
Esta variante costera en bicicleta transcurre por senderos, paseos marítimos y pasarelas de madera y no tiene grandes desniveles, por lo que es perfecta para ir sobre dos ruedas.
¿Es duro el recorrido?
Como en la ruta francesa, hay tramos en los que deberás caminar un poco, pero encontrarás albergues y pousadas de juventude (albergues para jóvenes) donde descansar.
En total, son unos 270 kilómetros de recorrido que se pueden realizar en unas cinco etapas de entre 50 y 75 kilómetros.
La mejor época del año para realizar este recorrido es en verano o primavera.
Vía de la Plata
Como sabes, la Vía de la Plata es un camino que recorre España de sur a norte (o al revés). Son mil kilómetros desde Sevilla hasta Santiago, por lo que esta opción sólo es recomendable si estás acostumbrado a pedalear durante largas jornadas y te encuentras en buena forma.
Recorres sierras, dehesas, páramos y cultivos, todos ellos en grandes extensiones de terreno que se pueden hacer muy largas.
Otro de los inconvenientes de este trayecto es que el cambio de latitud hace que las condiciones meteorológicas te cambien continuamente a lo largo del recorrido, por lo que tendrás que ir equipado con todo tipo de indumentaria y eso implica un mayor peso de la mochila.
La señalización es complicada pero, si lo que buscas es un desafío, éste puede ser un Camino muy bonito para ti. Además, una vez pasada Zamora, se puede ir hasta Astorga para seguir la ruta por el Camino Francés.
Camino del Norte
El Camino del Norte recorre la cornisa cantábrica, es decir, el norte de la península por la costa (por eso, también se le conoce como Camino de la Costa), partiendo desde Irún hasta llegar a Santiago de Compostela.
En total, son 870 kilómetros que pasan por San Sebastián, Bilbao, Santander y Gijón, es decir, un trayecto en el que podrás disfrutar de impresionantes playas y acantilados y unos paisajes inolvidables.
Lo normal es realizar este recorrido completo en bicicleta entre diez y quince días, con etapas que pueden ser de entre 60 y 115 kilómetros diarios.
Recorrido rompepiernas
El terreno es bastante complicado para el ciclismo. Recorrerás caminos y sendas, con barro, piedras y subidas exigentes, por lo que hay que estar preparado para un trayecto de ese nivel de dificultad.
Como en el resto de rutas, puedes descansar en numerosos albergues.
La mejor época para realizarlo es en primavera o verano, pero asegúrate de que no te pille una ola de calor, que en el norte también es posible.
Camino Primitivo
El Camino Primitivo es la ruta del Camino de Santiago más antigua, la primera que realizó el rey Alfonso II desde Oviedo hasta la tumba del Apóstol Santiago.
Actualmente no es la ruta más utilizada por los peregrinos pero es otra alternativa para ser recorrida a pie o, como hablamos en este post, en bicicleta.
Es un trayecto duro, muy exigente para los ciclistas por las fuertes pendientes que aparecen en el recorrido.
En total, son 320 kilómetros con buena señalización en general pero con menos servicios e infraestructuras que otras rutas como el Camino Francés o el Camino Portugués.
Se puede recorrer en unas seis etapas, pero lo normal es algo más de una semana, aunque recuerda que tienes que estar en buena forma para afrontar este reto.